Forecast: La Clave para No Perder el Rumbo Logístico
La clave logística está en anticipar la demanda.
LOGÍSTICAARTÍCULO
En logística, todo parte de una pregunta fundamental:
¿Cuánto vamos a vender y cuándo?
Eso, ni más ni menos, es el motor que mueve todo lo demás: compras, almacenaje, transporte… Si fallas ahí, el resto se tambalea.
¿Qué es la demanda y por qué es tan importante?
La demanda es simplemente cuánto esperan (o necesitan) tus clientes que les sirvas de un producto. Puede ser un artículo concreto, una línea entera o el total de la empresa. Pero ojo: no es solo “¿qué me van a comprar?”, sino también cuándo lo van a pedir.
Anticiparse a eso es lo que separa a los que improvisan de los que ganan de verdad.
Previsión y Forecast: El arte de anticiparse
Aquí entra en juego el forecast o previsión de la demanda.
En palabras simples:
Forecast = proceso para estimar situaciones desconocidas usando datos históricos y tendencias.
En logística, significa calcular cuántos productos te van a pedir, y en qué momento. Este proceso, aunque suene muy técnico, lo aplican desde meteorólogos hasta empresas tecnológicas, pasando por cualquier sector que no quiera quedarse atrás.
¿Para qué sirve el forecast?
Los beneficios de hacer una buena previsión son reales y tangibles:
Reducir el stock: Menos dinero parado en almacén.
Mejor nivel de servicio: Cumples lo prometido y evitas quedarte sin producto.
Menos stock obsoleto: Evitas que la mercancía caduque o pierda valor.
Aumenta el ROI: Mejoras el retorno de la inversión.
Bajas el capital circulante: Libera recursos para invertir mejor.
Pero no solo afecta al inventario: también determina las compras, la producción, el transporte, y hasta la atención al cliente.
Todo arranca con el presupuesto de ventas
Sin una estimación clara y mensualizada (mejor aún si desglosas por productos o familias), irás a ciegas.
Por eso, en logística todo parte de ahí: saber, con el mayor detalle posible, qué te van a pedir y cuándo.
¿Qué influye en la demanda?
Hay dos grandes variables:
El producto: Puede ser un solo artículo, una familia, o el total de la empresa.
El tiempo: ¿Previsión para el mes que viene, el trimestre, el año siguiente?
La fiabilidad de tus previsiones depende de cómo combines esos dos factores y del método que uses. Normalmente, a mayor agrupación de datos (más ventas, más productos), más precisión. Es lo que llaman “la ley de los grandes números”: los errores se compensan.
¿Y qué factores la hacen subir o bajar?
Controlables:
Precio
Promociones
Publicidad
Acciones comerciales
Comodidad de compra
No controlables:
Acciones de la competencia
Gustos del consumidor
Nivel de renta
Factores demográficos (edad, sexo, geografía)
Factores sociales y culturales
Situación económica general
Modelos matemáticos: útiles, pero no milagrosos
Las matemáticas ayudan a interpretar y predecir la realidad. Existen mil modelos para prever la demanda, y cada uno sirve para una situación diferente. El reto es ajustar los valores de cada parámetro a la realidad cambiante de tu negocio. Los modelos no hacen milagros, pero bien usados, te evitan muchos disgustos.
Prever la demanda no es adivinar el futuro, es prepararse para él.
Cuanto mejor anticipes lo que viene, más eficiente, rentable y competitivo serás en toda la cadena logística.
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